La producción de hidrógeno es un proceso clave en la industria energética y puede lograrse de varias maneras. Estas técnicas incluyen:
- Electrólisis del agua: Este método implica dividir el agua en hidrógeno y oxígeno mediante electricidad. Es una opción sostenible cuando se utiliza energía renovable.
- Reformado de gas natural: Se produce hidrógeno a partir de gas natural mediante reacciones químicas a altas temperaturas. Aunque común, genera emisiones de carbono.
- Gasificación de biomasa: La biomasa se convierte en hidrógeno mediante gasificación a alta temperatura y presión.
- Electrólisis de alta temperatura: Similar a la electrólisis del agua, pero a temperaturas más elevadas, lo que puede aumentar la eficiencia.
- Fermentación biológica: Algunos microorganismos producen hidrógeno a partir de materia orgánica en un proceso conocido como fermentación biológica.
Elegir el método adecuado depende de factores como la disponibilidad de recursos, el coste de la energía y las consideraciones ambientales.
